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"De raíces campesinas y de espíritu emprendedor,
desde el 2009 que plantamos calçots. "
¿Dónde, cuándo y por qué?
Nuestra historia dice así:
Nuestra historia se remonta al año 2009 en la Guardia de Urgell, un pequeño pueblo remoto y idílico, situado en Tornabous (Lleida), tocando a los pies de la Sierra de Almenara.
Cuando Macià y Severino, padrinos de Mia, un joven inquieto con empuje y enamorado de su tierra, comenzó a animarse por el mundo de la agricultura, el mundo que lo ha visto y lo ha hecho crecer.
Después de cierto tiempo trabajando y cultivando la tierra familiar, decidió hacer un salto innovador y empezar a cultivar un producto poco común en estas; los calçots. ¡Y desde ese momento los calçots son el leit motiv de Mia hasta el día de hoy!
"Gracias a los conocimientos que los abuelos le enseñaron, la oportunidad de trabajar las tierras de la familia, el gran bagaje profesional y la innovación constante, nace El Guardià Calçots.
Un proyecto que, junto a Lenke, Ingrid y Anna, Mia comparte con mucho orgullo, passión y energía.
Con y para vosotros, gracias abuelos."
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